Desde su fundación en 1948, Fluke ha colaborado en la definición y el crecimiento de un mercado tecnológico único, proporcionando capacidades de medida y solución de problemas que han crecido hasta ser fundamentales en los sectores de fabricación y servicios. Cada planta de fabricación, oficina, hospital o instalación de nueva construcción representa hoy en día un posible cliente de los productos Fluke.
Desde la instalación, el mantenimiento y el servicio de componentes electrónicos industriales hasta la medida de precisión y el control de calidad, los instrumentos Fluke ayudan a mantener tanto su negocio como otras industrias en todo el mundo en marcha. Entre los clientes y usuarios finales habituales se incluyen técnicos, ingenieros, metrólogos, fabricantes de equipos médicos y profesionales de redes informáticas; en definitiva, gente cuya reputación depende de sus herramientas.
Fluke ha alcanzado la primera o la segunda posición en todos los mercados en los que compite. Los instrumentos Fluke tienen fama por su portabilidad, resistencia, seguridad y facilidad de uso, así como por sus altos estándares de calidad.